viernes, julio 23, 2004

La hojarasca

Y yo me pregunto…
 
¿Por qué en los funerales de las películas y series siempre llueve? Que no digo yo que me parezca mal, pero que llueva en el 90% de los funerales que vemos en el cine, invariablemente del mes en que muera el protagonista del funeral en cuestión… me parece raro. Por que claro, si el funeral es en noviembre, enero, o incluso abril, me parece bien que esté diluviando, pero, ¿y si el funeral es en julio? Porque digo yo… ¿La gente en el cine se muere en julio? Aunque bueno, quizás arreglan el guión para que todo ocurra en los meses propensos a la lluvia.
 
Y no sólo es el hecho de la lluvia en los funerales. Pregunta para subir nota: ¿quién reparte los paraguas en los funerales cinematográficos? Porque ahí todo el mundo tiene un enorme paraguas negro: la chica, los familiares, los amigos, e incluso el cura que oficia el funeral tiene a alguien a su lado sujetándole el correspondiente paraguas negro. Todos resguardados bajo la lluvia… menos el protagonista. Que será muy protagonista, pero no tiene su paraguas negro. ¿Será que queda muy bonito en cine poner al protagonista con la lluvia cayéndole por la cara, mojando sus ojos llenos de rabia por la muerte del susodicho?
 
Y eso independientemente de que el protagonista esté estrechamente relacionado con el cadáver… o no. Porque eso no importa. Muera quien muera, a su funeral siempre van una docena de personas que son todos, protagonistas principales o secundarios de la película o serie. ¿Qué alguno de los secundarios no conocía al muerto? Da lo mismo. En el contrato pone que tiene que estar ahí, poniendo cara triste, sujetando ese paraguas negro, y empapándose los zapatos en los charcos que se producen en la hierba.
 
El final de los funerales, es siempre el mismo. Los familiares del difunto se meten en un enorme coche de color negro (aunque en otras partes de la película o serie, el coche familiar fuese una ranchera de color naranja chillón). La chica se va con ellos, por supuesto. Pero el protagonista no. Ese se tiene que ir bajo la lluvia, sin paraguas, con cara triste (o llena de odio preparando la venganza del asesinato del difunto), hacia el lado contrario a los demás. Da igual hacia dónde se vaya el resto. El protagonista se va justo por el lado contrario, aunque tenga que dar un largo rodeo para llegar a su casa (bajo la lluvia, por supuesto).
 
Si es que los guiones están empezando a ser demasiado predecibles.
 
Cambiando radicalmente de tema. Ayer fui al cine a ver de nuevo Harry Potter y el prisionero de Azkaban. Me encanta la película (ya me gustó mucho el libro). Por muy en contra que esté de J. K. Rowling por el último libro, hay que reconocer que esta mujer ha hecho mucho. No sé de donde sacará sus ideas (quizás sea una mezcla de todo lo que haya leído en su vida, una especie de mezcolanza de plagios), pero aún así, hay que reconocer que la saga me encanta.
 
La película está muy bien hecha. Vale que faltan muchas cosas, pero lo que está está  muy bien. Destacable es Gary Oldman como Sirius Black (pero como me gusta Sirius Black), y todo el final de la película. Desde que aparece el perro negro y se lleva a Ron Weasly hacia el Sauce Boxeador. A partir de ahí todo me encanta. La discusión entre Snape y Sirius es de lo mejor, y también la conversación de éste último con Harry. Vale que me dé mucha rabia que Lupin no se tome su poción y escape Peter Petigrew, pero supongo que es lo mejor para la saga. Si todo sale bien, se acabarían los libros, ¿no? Sólo decir que espero que el sexto sea mejor que el quinto aunque no salga uno de mis personajes favoritos.
 
Vaaaaale. Quizás yo esperaba que sabiendo lo que pasa, Lupin se tomase la poción. Pero nada. Creo que por muchas veces que vea la película, él seguirá olvidándose de eso una y otra vez. Mira que son olvidadizos los licántropos.

1 comentario:

Eugenio dijo...

Pues, como ya te he dicho, lo de los paraguas negros y los coches más negros todavía se debe a las funerarias que lo añaden en el contrato...
Lo de por qué los protagonistas se mojan, es porque, uno llegan tarde porque estan preparando su venganza y claro, ya no quedan paraguas o, dos, porque nadie quiere acercarse a ellos sin beberse un par de copas antes, cosa que haran en casa del susodicho con la excusa de pasar un rato juntos...
Ahh, creo que en el funeral del tío Ben de Spiderman no llovía y tampoco en el de Norman Osborn, aunque en este si que hacía una ventolera enorme...
Ahh, en el del padre de Elektra en Daredevil sí que llovía...